El Convenio de Minamata de las Naciones Unidas sobre el mercurio con miras a proteger la salud humana y el medio ambiente, hace un llamamiento a la disminución gradual del uso de las amalgamas dentales y contiene una serie de disposiciones relativas al seguimiento de los avances que se realicen en este campo. La amalgama dental está formada en un 50% aproximadamente por mercurio, que sería liberado en forma de vapor y al medio ambiente al remover o sustituir piezas dentales portadoras de empastes de este tipo, con lo cual se produce temporalmente una mayor absorción. Para llegar a la desaparición de las amalgamas dentales habrá que reducir el uso de las mismas y, además, adoptar las siguientes medidas: A partir del 1 de julio de 2018, en general no podrá utilizarse amalgama en el tratamiento de dientes de leche, de niños menores de 15 años y de mujeres embarazadas o en periodo de lactancia.

A partir del 1 de enero de 2019, los gabinetes dentales donde se remuevan piezas dentales u obturaciones con amalgama deberán tener separadores de amalgama para retener y recoger sus partículas, así como garantizar que dichos residuos sean recogidos y tratados por empresas autorizadas. Por tanto, la tendencia de la normativa de los estados miembros de la Comunidad Europea se encamina a la disminución y eliminación gradual del uso de la amalgama dental y a la regulación de sus residuos por lo que la remoción y sustitución de piezas o los empastes de amalgama de las mismas, cuando sea necesario, debería hacerse de una forma controlada y aislada para evitar la dispersión del material y su absorción por el paciente y los profesionales. En nuestra clínica dental hemos desarrollado para nuestros pacientes un protocolo de extracción y sustitución de amalgamas dentales con aislamiento absoluto que asegure los siguientes puntos:

1 Aislamiento del paciente, mediante colocación de métodos barrera (gafas, gorro, guantes en continua sustitución para los profesionales). En este punto es fundamental el uso de dique de goma, que es una barrera de látex que crea un aislamiento absoluto respecto al resto de la boca de las piezas dentales que van a ser tratadas.

2 Aporte de aire independiente con flujo de oxígeno.

3 Refrigeración y aspiración directa de los residuos de amalgama removidos, mediante aspiración tanto intraoral como inmediatamente en contacto con las piezas a tratar. Los residuos de amalgama son filtrados, recuperados y eliminados de forma segura por nuestro servicio acreditado de recogida y gestión de residuos.
4 Sustitución del material de obturación por una alternativa totalmente saludable y duradera, como son los composites, que además aportan una gran estética blanca a las obturaciones.